Los trastornos de la conducta alimentaria (TCA) son de sobra conocidos con todos. Pero, ¿realmente es así?

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Se conocen muchos de sus síntomas, de sus consecuencias, de sus cuerpos... Poco creo que se sabe de lo que realmente sucede en la mente y el alma de una persona que ha sufrido un TCA.

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¿Te obsesiona comer muy sano? ¿Utilizas la comida para calmar tu ansiedad? ¿Dejas de hacer planes por no saltarte tu dieta? ¿Te sientes mal cuando te comes un delicioso brownie?

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No pretendo asustarte, solo dar visibilidad a la realidad que hay más allá de la conocida imagen de una chica o chico con infrapeso. No todo comienza con un problema de imagen, ni con un deseo de mantener la báscula a raya. A veces es falta de autoestima, de capacidad de gestionar las emociones que nos sobrepasan, exceso de control y perfeccionismo... A veces simplemente es. Es cárcel, es muerte lenta y es depresión. 

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Te invito a conocer otra perspectiva.